Ver para creer… o creer para ver.

En numerosas ocasiones tenemos la duda de si es necesario entender el feng shui para que este funcione.

La respuesta es claramente que NO. No es necesario creer para que el fs funcione. Lo único que es obligatorio para conseguir un un feng shui positivo es realizar los cambios propuestos por los especialistas: cambiar la ubicación de algunas cosas, materiales, colores… Realizarlo con una actitud positiva y con ilusión siempre ayuda.

Si confías en que el feng shui cambie las situaciones… mejor. Pero no es imprescindible. Ya que las leyes del feng shui funcionan ya sean las personas conscientes o no de ello, tengan fe o no.

Para dar una explicación que se pueda entender podríamos poner el símil del cuerpo-mente. Está muy extendido que cuerpo y mente tienen una relación directa y que si cuidamos uno (comer sano y ejercicio) se beneficia el otro (obtenemos una mente más despierta y alerta). Y al contrario, cuando tenemos una enfermedad en nuestro cuerpo, sobre todo las importantes, una actitud positiva e ilusión hacia la recuperación, hace que la enfermedad se cure con mayor rapidez. El mens sana in corpore sano, funciona desde hace unos cuantos siglos.

Podríamos decir lo mismo con la casa y sus habitantes, como está la casa (o negocio) estás tú. Por lo tanto, si cambiamos ese entorno modificamos las situaciones de esos habitantes. Si los habitantes (trabajadores – clientes) son conscientes ayuda, pero nunca es necesario.

En resumen, haciendo feng shui obtendremos resultados aunque nuestra gente (Clientes, Directivos, Staff) no sea consciente de ello.